Definitivamente no es trivial el aprendizaje. Las concepciones mostradas visualizan que es un proceso complejo, no solo de memorización de información o de extracción de un discurso, si no que requiere de desarrollar pasajes significativos que permitan la adquisición de competencias aplicables en todos los campos, y que éstas den acceso a diferentes canales de acción de la persona que las adquiere
Nosotros nos hemos encargado de hacer que el aprendizaje sea trivial al medirlo con una serie de preguntas, que supuestamente responden a los conocimientos acumulados en el curso o semestre por parte de los alumnos, en este sentido nos encontramos a un aprendizaje memorístico en donde los estudiantes recurren a la memorización momentánea de contenidos, ello resulta que en un tiempo corto todo lo memorizado sea olvidado y no tenga un impacto significativo en los jóvenes. Por otro lado los docentes quedamos satisfechos con este tipo de medición en donde los alumnos que tiene esta habilidad de memorización sean los que adquieran mejores resultados
En este sentido la observación y la medición que realizamos, creo que, no son suficientes para reconocer un aprendizaje fidedigno en los alumnos, recomiendo que se tienen que tomar en cuenta una evaluación objetiva donde no sólo se mida con preguntas, sino, que se tomen en cuenta el desarrollo de habilidades y capacidades (competencias) que desarrollan los alumnos al interior del aula
Las calificaciones que actualmente llevamos a cabo no reflejan una evaluación integral en donde se tomen en cuenta elementos subjetivos, capacidades y habilidades de los alumnos, esto hace que el aprendizaje sea trivial y sólo se califique una mínima parte de la esencia de los jóvenes.
Nosotros nos hemos encargado de hacer que el aprendizaje sea trivial al medirlo con una serie de preguntas, que supuestamente responden a los conocimientos acumulados en el curso o semestre por parte de los alumnos, en este sentido nos encontramos a un aprendizaje memorístico en donde los estudiantes recurren a la memorización momentánea de contenidos, ello resulta que en un tiempo corto todo lo memorizado sea olvidado y no tenga un impacto significativo en los jóvenes. Por otro lado los docentes quedamos satisfechos con este tipo de medición en donde los alumnos que tiene esta habilidad de memorización sean los que adquieran mejores resultados
En este sentido la observación y la medición que realizamos, creo que, no son suficientes para reconocer un aprendizaje fidedigno en los alumnos, recomiendo que se tienen que tomar en cuenta una evaluación objetiva donde no sólo se mida con preguntas, sino, que se tomen en cuenta el desarrollo de habilidades y capacidades (competencias) que desarrollan los alumnos al interior del aula
Las calificaciones que actualmente llevamos a cabo no reflejan una evaluación integral en donde se tomen en cuenta elementos subjetivos, capacidades y habilidades de los alumnos, esto hace que el aprendizaje sea trivial y sólo se califique una mínima parte de la esencia de los jóvenes.